Como lancé mi negocio de 2 millones de dólares

Entre tantas conversaciones que he tenido con emprendedores, me percaté de un tema o una pregunta recurrente, el famosísimo: ¿cómo empezaste?

En mi caso en particular: ¿cómo empezaste Amazónica?, mi negocio de gastronomía latina en Miami.

Pero el “¿cómo empezaste?” realmente engloba una cantidad de subpreguntas:

• ¿Cómo sabías si la idea era buena?

• ¿Cómo hiciste para dejar el miedo atrás y lanzarte?

• ¿Cómo sabías que el producto iba a gustar?

• ¿De dónde sacaste el dinero?

• ¿Qué te inspiró?

• ¿Por qué ese nombre?

• ¿Por qué esos productos?
  

La razón por la cual estas preguntas son tan recurrentes es que reflejan TODO lo que uno se pregunta cuando cree tener una buena idea de negocio, pero no sabe si debe tomar acción o no. Reflejan una emoción poderosísima: el MIEDO que se siente ante la incertidumbre de lanzar un producto o servicio.

La realidad es que yo también estaba muerto de miedo. Primero que todo, tenía 23 años, estaba montando un negocio en un campo del cual no sabía absolutamente nada (gastronomía), y lo estaba haciendo lejos de mi familia en un país nuevo y diferente para mí: Estados Unidos.

En retrospectiva, la palabra “miedo” no le hace justicia al pánico que sentía.

Mi forma de abordar ese miedo fue contratar a unos consultores para que me ayudaran a plantear el negocio y, de esa forma, “controlar” todas las variables posibles y obtener algún sentido de tranquilidad.

En mi caso, me salió el tiro por la culata, porque rápidamente y de forma evidente, los consultores me hicieron entender que no creían que el negocio iba a ser exitoso… pánico total.

Al final, con mucho miedo y poca estructura, lanzamos… Afortunadamente, desde el primer día teníamos una fila de clientes. Por más de 8 años, hicimos crecer la empresa al punto de facturar 2 millones de USD al año, y finalmente, a comienzos de 2024, vendí mi participación en la misma. 

Aunque nos fue bien, en realidad nuestro proceso de lanzamiento fue muy básico, arriesgado, y no muy profesional, no lo volvería a hacer así. Desde ese entonces he iniciado otras 3 empresas, incluyendo Copiloto, y he explorado, pero no ejecutado, muchísimas más. Aunque siempre he sentido miedo al lanzarme, hoy conozco y domino herramientas que ayudan en este proceso, así mismo hemos construido una “fórmula” que te ayudará a responder tres preguntas esenciales:

1. ¿La idea que tengo vale la pena? ¿Es un buen negocio?

2. ¿Cómo puedo refinar y mejorar mi idea para sobresalir?

3. ¿Cómo hago para tranquilizar y acompañar mis miedos?
   

Después de atender a muchos clientes en coaching, me di cuenta de que estos miedos eran un dolor frecuente. Por eso mismo decidimos crear un reto con Copiloto llamado Despega.

Despega es el primer producto que vamos a lanzar. Es un reto de 4 semanas, 4 horas a la semana, donde haremos un paso a paso de la metodología que desarrollamos para definir y refinar tu idea de negocio.

Nuestro objetivo es que al terminar el reto Despega, obtendrás claridad y uno de dos resultados:

1. Refinaste y mejoraste tu idea de negocio, y la empiezas a ejecutar con confianza.
   O

2. Te diste cuenta de que tu idea de negocio no representa una oportunidad interesante y te ahorraste tiempo y dinero en ejecutar un proyecto que no tiene mucho potencial.

Cualquiera de los dos resultados es ganancia. Cualquiera de los dos resultados es claridad y certeza. ¡Nada vale más que eso!

Así que, con muchísima emoción e ilusión, les presento Despega. A todos los suscriptores de este newsletter les ofrecemos la primicia y, además, un descuento importante en agradecimiento por su interés y apoyo.

A título personal, les cuento que llevamos meses desarrollando nuestra metodología/estructura y creo firmemente que esta herramienta práctica les va a ayudar muchísimo (y la podrán usar toda la vida). Creo tanto en este producto que, si no quedan satisfechos, les devolvemos su dinero. Es una promesa.

Así que, para todos los que están sentados en una idea de negocio con la cual sueñan, pero ALGO los ha frenado, los invito al reto Despega. ¡Es hora de coger vuelo!

Mucho por aprender y mucho por hacer.
Ammiel Manevich